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Entrevista a Mariana Pallasco

’Desde hace mucho tiempo somos los impulsores de la evaluación’

Secretaria Nacional de la Unión Nacional de Educadores

27 de mayo de 2009

La UNE, reconociendo que la evaluación es necesaria, tiene cuestionamientos de fondo al proceso que propone el Ministerio de Educación. Mariana Pallasco, Secretaria Nacional de la UNE, los expone en la siguiente entrevista.

¿Por qué se oponen los maestros a la evaluación?

Primero, no nos oponemos, desde hace mucho tiempo, somos los impulsores de la evaluación. En 1999 presentamos una propuesta de Ley con Participación Social, que en sus capítulos esenciales habla de la evaluación integral al sistema educativo. Fue debatido en dos Congresos de Educación Pública con la participación de docentes, padres de familia y estudiantes. En el último Congreso de la Educación Pública realizado en el 2007, con la participación del Ministerio de Educación, se plantea la creación de una Contraloría Social, donde todos los actores rindamos cuentas con honestidad sobre nuestra participación.

Si es así, ¿Por qué la percepción general es que la UNE y los maestros rechazan la evaluación?

Hay que dejar en claro que no es a la evaluación a la que nos oponemos, es al proceso de medición porque la propuesta que tiene el ministerio no es una evaluación, pues ésta como concepto permite hacer un control, un seguimiento permanente para mejorar procesos.

La crisis de la educación es la consecuencia de 30 años de neoliberalismo aplicado en el país. No podemos negar esa realidad, debemos evaluarla. Nuestra propuesta de evaluación integral establece un objetivo que es mejorar la calidad de la educación pública. La discusión debe ser cómo aporta la evaluación a este objetivo. Planteamos que se evalúen los 30 años de neoliberalismo, las condiciones socioeconómicas del país, los gobiernos, a las instituciones internacionales que han endeudado al país, ONGs, las políticas del FMI y Banco Mundial respecto de la educación, que permita desentrañar la problemática.

Debe iniciar por una evaluación diagnóstica que permita determinar potencialidades y falencias, la situación de la escuela, del sistema educativo y tener un punto de partida contando con información sobre capacitación, currículum y su pertinencia, infraestructura, la condición en la que se encuentra el proyecto educativo.

Pero varios de esos aspectos ya se los ha hecho

Solo desde punto de vista de la medición, que no es lo mismo que evaluación. Han aplicado las pruebas aprendo 2007 que es la base que el Ministerio tiene para iniciar una reforma curricular en la educación básica, pero tienen graves errores. La UNE cuestionó los instrumentos desde que se inició su aplicación. En ella los niños tienen una medición de 5/20 en Matemáticas y 6/20 en Lenguaje. Si esta información de la medición, porque no fue evaluación al sistema educativo, establecía que los niños tenían deficiencias en estas materias se debía apuntar a la capacitación de los maestros, pero eso no lo hizo el Ministerio, la información fue utilizada para desprestigiar al magisterio, decía que los niños no conocían esas materias, pero no hacía una valoración amplia del sistema educativo, no decía que las escuelas no contaban con servicios básicos, que más de 5000 escuelas han sido cerradas y hasta el momento no se han reabierto, que contaba con más de 6800 escuelas unidocentes, que la mayoría de escuelas en el país son pluridocentes y no son completas, que tienen déficit en docentes.

Por ello es que decimos que es necesario que se haga una evaluación integral que determine los resultados de años de aplicación del neoliberalismo.

Comparte la UNE la visión de hacia dónde debe ir la educación que se viene implementando

No la comparte, nosotros hemos enfrentado estas políticas porque desde esa visión neoliberal la educación era entendida como un gasto, desde la visión de los organismos internacionales se consiguió que la educación vaya en decadencia. Se fue eliminando la escuela pública y asumiendo que la escuela privada está en mejores condiciones y asumiendo la educación como un servicio y no como un derecho. La educación fue mercantilizada.

Si se evalúa al docente en este contexto, el futuro de la educación continuaría respondiendo a esa concepción mercantilista

Esa discusión le pedimos a Rafael Correa. Es verdad que hoy vivimos un nuevo momento, el gobierno y la propia Constitución recogen que la educación ya no es un gasto sino una inversión, que es el 6% del PIB que se debe invertir en educación, pero se pueden quedar en un terreno estéril, no servir para nada, con instituciones muy bien dotadas, instituciones del Milenio -como las que se han creado- pero si no hay la discusión central del proyecto educativo, esa institución podrá pasar por muy linda y seguirá produciendo esa escuela tradicional tan criticada, por eso hemos planteado la necesidad de un debate nacional sobre el proyecto educativo que la Ley de Educación que debe ser discutida en la Asamblea Legislativa no debe tener únicamente la visión unilateral del Ministerio de Educación o de la Presidencia, sino que debe contar con la participación democrática de los actores de la educación. Hemos planteado que vayamos a una Conferencia Pedagógica Nacional, que es el espacio propicio para el debate sobre educación que debe tener coherencia con el proyecto de desarrollo, de cambio que tiene el país. Si hoy tenemos una visión diferente de país, que estamos en esta tendencia en donde se ha reconocido un país mas justo, donde tenemos una Constitución que recoge derechos, la educación tiene que estar ligada íntimamente a ellos. Si sabemos qué Ecuador queremos, debemos saber qué niño, qué joven, qué profesional vamos a formar para ese Ecuador. Pero, ¿Cómo lo hacemos?, estructurando un Proyecto Educativo coherente con el nuevo momento.

Si no se lo estructura así, se podrán tomar todas las pruebas que quieran a los niños, a los jóvenes, a los maestros y la educación no cambiará porque simplemente no responderá a la necesidad del país, a la necesidad urgente que tienen hoy los niños.